martes, 4 de junio de 2013

Origen de la alpargata


             La alpargata o zapatilla de esparto, cuyo origen se remonta a los íberos y romanos, fue el calzado que utilizaban los obreros y campesinos de España hasta bien avanzado el siglo xx. Siendo un calzado de trabajo, la alpargata, modesta, económica y de confección artesanal, utilizaba como materia prima el esparto existente en la montaña Mediterránea.
Cuando dejó de ser atuendo de trabajo en el medio rural, pasó a ser calzado  veraniego de descanso, por la comodidad, frescura e higiene, que proporcionan las fibras naturales  usadas en su confección.


Se trata de un calzado natural, ligero y transpirable, ideal para la época estival, muy utilizado en todos los países mediterráneos. Este calzado tiene gran tradición en todo el territorio de la Comunidad Valenciana Cataluña, La Rioja, Navarra, así como el Sur de Francia. Las había con cintas y sin ellas, siendo las primeras las que se utilizaban para bailar, y que han permanecido como  parte de los trajes regionales.




La confección de alpargatas era un oficio artesanal, vinculado a las zonas rurales, como ocurre en el caso de Cervera del Río Alhama (La Rioja). Se trataba de una actividad complementaria a la agricultura, que se desarrollaba mayormente en el ámbito doméstico, donde se integraba el trabajo de todos los miembros de la familia en las diferentes fases de su confección.
A finales del siglo XIX se produjo un gran auge en la alpargatería. En esta época se produjo una industrialización del proceso artesano, con la presencia de obreros especializados  en cada fase del proceso: urdidores, encargados de disponer la trenza y el hilo necesarios para la realización de la suela; cosedores, que cosían la suela; cortados, que con patrones, jaboncillos y enormes tijeras aprovechaban las piezas de lona con precisión geométrica; aparadoras, que cosían los cortes o caras; y, por último, las certeras y bigoteras, que con grandes agujas terminaban las alpargatas.


En Esparteras, rendimos homenaje a este oficio tan artesanal y rural, que nos han enseñado nuestros abuelos y padres. Además consideramos que este es el calzado que mas nos representa, porque se trata de un calzado fresco y cómodo, ideal para utilizar en nuestros paseos veraniegos, porque utilizamos fibras naturales y permite el contacto directo de nuestros pies con lo natural, porque se sigue fabricando de forma artesanal y las seguimos cosiendo manualmente, una a una, con toda  la paciencia y cariño que se merecen nuestros clientes.

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